Pizza de quinoa

Cuando decides apostar por una dieta microbiótica, hay cosas de las que sabes que te vas a despedir (al menos por un tiempo).
Los cereales son una de ellas. Y, de entre los cereales, todo aquello en lo que el trigo esté presente. El trigo sarraceno es otro cantar, pero a él no vamos a llegar hasta que nuestro intestino esté bien "selladito".

La pizza es una de mis perdiciones y forma parte de una especie de ritual. Hay días en los que necesitas ese gesto de comer algo rico mientras ves un partido de fútbol o tu serie favorita. Mientras, no lo neguemos, el resto del personal se pone ''morao" a chuches, patatas fritas y guarrerías varias.

Así que ahí estaba el reto, en conseguir una pizza que cumpliera todos los requisitos: sin cereales, sin gluten, vegano (opcional), sin lactosa y sin azúcar.

¿Sabe igual? Obviamente, no. Pero ¿está rica? Sí, buenísima. ¿Admite opciones? Ya lo creo.

Os comento algunas cosas sobre el queso. No tomo lácteos. Hay opciones veganas para ello, pero todos los quesos que he investigado por internet para que queden fundidos (hechos en casa) tienen soja (el mismo mal, según mi dieta). Y si me fijo en las opciones que venden en supermercados veganos, tienen entre sus ingredientes o bien grasas hidrogenadas o bien almidón de maíz, así que tampoco me valen. Cuando pueda tomar lácteos de cabra y/o oveja, podremos meterle más alegria.

Y sobre la masa: es facilísima. Vamos con ello:

Ingredientes

400 gr quinoa
200 gr agua
5 gr levadura química
10 gr sal
10 gr ajo en polvo

Empezamos por cubrir los 400gr de quinoa en un bol con agua fria. Dejamos que repose, tapada con un film transparente, durante 6-8 horas.

Pasado ese tiempo, encendemos el horno a 220°. Vamos preparando nuestra masa de pizza: echamos en un procesador de alimentos la quinoa (que hemos lavado), la sal, la levadura y el ajo en polvo. Batimos hasta que se convierta en una masa liquida.

Ponemos un papel de hornear en el molde que elijamos, lo pincelamos con aceite y vertemos la masa. Lo llevamos al horno durante 15 minutos. Pasados estos, le damos la vuelta y horneamos por 10 minutos más.

A continuación le ponemos lo que mas nos guste: tomate triturado sin azúcar, espolvoreamos con orégano. Ponemos unas láminas de champiñones, aceitunas negras, albahaca y pimiento rojo.

Volvemos a meter al horno 10 minutos más y...¡Lista!

Espero que os encante.